‘DIFÍCIL DECIR ADIÓS’

Destinos finales de Neymar y Paul Pogba, así cómo los inevitables y tristes desenlaces de las carreras futbolísticas de dos jugadores de fantasía, en Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, culminarían en Manchester, Madrid, Barcelona y Turín

Por René Romano @reneromanosport @IAmRomano10

LOS ÁNGELES, EE. UU.—Nadie puede negar que, en más de algún determinado momento, durante el vaivén, algunos dábamos por hecho que Neymar recalaría una vez más en el fútbol de la liga española.

Y obvio, no importando donde o cuando, ya fuese dentro de las filas de su exequipo, el FC Barcelona, o de pérdida o carambolazo, en Chamartín o Valdebebas con la vestimenta del Real Madrid.

Empero, nadie se imaginó que su destino transitorio y por lejos no-permanente o fijo, tras el culebrón de verano, sería recalar un poco más dentro de las filas del PSG, dejando a la expectativa, y para el gran desenlace, lo que será su destino final.

Algo que yo, por lo menos, veo siendo cuando llegue a Inglaterra como reemplazo de Paul Pogba en el Manchester United.

¿Sorprendido? ¡Yo no!

Les diré por qué por qué. Sin rodeos y al grano. Al estilo Romano.

Porque el Manchester United no solamente lo buscará, sino, además, lo requerirá y lo necesitará.

Especialmente tras el carambolazo que representaría el esperado ‘transfer’ del galo a las filas del Real Madrid, donde le esperan con brazos abiertos.

“INEVITABLE”

Ese traspaso de Pogba al Bernabéu, cuando finalmente se dé, podrá más que cualquier oferta, berrinche o deseo del brasileño del PSG, que no tendrá otra opción más que emigrar a tierra desconocida, luego de hacerse de un sinfín de enemigos en suelo ibérico tras un estira y encoge con su actual equipo, una demanda por medio con su antiguo equipo, y un divorcio total con quien hubiese sido su nuevo equipo, gracias a su rechazo hacia su escudo y único color.

Y si bien es cierto que, el Manchester United tiene contemplado desde ya, firmar a los lusitanos del Benfica, Ruben Dias (defensor central) y Florentino Luis (contención), lo de Neymar continúa siendo un secreto a gritos, que se concretaría sí o sí, especialmente con el apoyo y aval total de Nasser Al-Khelaifi.

Sería un final digno de película, no solo para Neymar, a sus 27 años (casi 28), sino además un bálsamo y necesario recambio de filas para un Manchester United, que necesita, por lo que dicta su historia, volver a primer plano Mundial.

TRISTE ADIÓS

Un final digno —en un equipo élite— de respeto y de acuerdo con sus facultades, que llega justo, previo al adiós final de lo mejor que el fútbol nos ha dado en las últimas décadas, representadas en el futbol de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.

Uno que harían en dos equipos de clase Mundial, como el FC Barcelona y la Juventus de Turín respectivamente, previo a su arribo a un fútbol menos competitivo (y no digno de su estatura), ya sea en su país natal, o en el territorio actual de un viejo y querido amigo, como lo es David Beckham, hoy en día, propietario y dueño de bienes y raíces dentro de ‘suelo emelesero’.

Un adiós que no espero —en lo personal— con brazos abiertos, debido a que no lo harían en su mejor momento, gracias a lesiones, frustraciones y dolores, y que golpearían —frente a mis ojos, por lo menos— la imagen que mejor tenemos en la mente y retina, de su fútbol.

¿Y EL BALÓN?

De lo que son capaces de hacer y de lo que han sido capaces de hacer para que el mundo entero haya estado pendiente de cada uno de sus pasos en por lo menos, la última década y fracción.

Vea, lo entiendo y lo comprendo. Los finales no siempre son felices, pero me quedo con la promesa de que, en la vida, cada final es sólo el principio de otra historia.

En cierre, y en cuanto al premio del ‘Balón de Oro’ que se entrega a final de año se refiere, es Lionel Messi el que parte con una gran ventaja sobre Cristiano Ronaldo.

Empero, también lo hace con la mayor desventaja, debido a que los que lo eligieron al premio ‘The Best’, no tienen injerencia o influencia alguna en el que otorga el ‘Balón de Oro’ de —la revista— France Football.

En esa votación, o referéndum, todos son elegidos de forma sigilosa, cautelosa, precavida, y preelegida, y en beneficio de los intereses de los que minuciosamente fueron otorgados con el privilegio y responsabilidad de elegir a su ganador: periodistas amigos de la revista, y los amigos de sus amigos, de los amigos de sus amigos.

Los dejo. Hasta la próxima.

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