‘DIAMANTE EN BRUTO’

La NHL podría dar un golpe mediático dentro de los hispanoparlantes si aprovecha el espacio televisivo y sus recursos ante la ausencia de la NBA, la NFL, la MLS y la MLB; Telemundo e ESPN Deportes las opciones del ‘Vals sobre el Tundra’

Por René Romano @reneromanosport @IAmRomano10

LOS ÁNGELES, EE. UU.— Vaya si no es cierto que, da el sartenazo, quien tiene el sartén por el mango.

Algo que ya nos demostró la Bundesliga, y que en Estados Unidos, puede lograr la NHL siempre y cuando se mantenga firme en sus objetivos y se le adelante las otras ligas de abolengo —dentro de Estados Unidos—a escala Mundial.

Les diré por qué. Sin rodeos y al grano. Al estilo Romano.

Porque al volver antes que la MLB, la NBA, la NFL y la MLS, podría dar un tremendo golpe mediático como el que propinó la Bundesliga al Mundo del Fútbol, y que por muy aburrida que sea o por muy bajo y deslucido que sea el nivel, es la única opción tras las pausas globales por el famoso Covid-19.

Eso dicho, es la oportunidad dorada para la NHL para irse a la carga por esos ratings tan ansiados, pero sobre todo, para atacar un mercado nuevo, como el hispano, que lo aceptaría y los seguiría por curiosidad, su dinámica, su atractivo, sus más mínimos detalles, pero más porque es una especie de fútbol.

Uno sobre hielo…


‘UN VALS’

Es un Vals sobre el tundra, como yo mismo lo cristiané.

Fútbol cinco a cinco en patines con un stick. Uno que se presta para el gol y que, no es extraño al juego fuerte y competitivo.

Un vaivén de emociones, que de retornar en el momento adecuado, como el que se les presenta el día de hoy, podría crecer en números y cifras astronómicas, siempre y cuando, se preparen acorde y exijan el debido respeto de parte de las televisoras.

Vea, tal y como FOXDeportes e ESPNDeportes se compartían anteriormente la Champions League, lo pueden hacer Telemundo e ESPNDeportes con la NHL...

Razón por la cual, sus mercadólogos y mercaderes, deben ser inteligentes.

Los derechos de transmisión en ingles los tiene MSNBC que puede usar como repetidora a Telemundo, mientras que ESPN, que tiene lazos ‘fuertes’ (por decirlo así) con Disney, que tiene ‘voz y voto’ y ‘peso de sobra’ en la NHL, puede prestar los servicios de ESPNDeportes para llenar esos espacios por televisión.

Y es que la idea no es descabellada.

Recientemente, la NHL abrió sus alas al mercado en Español. En la web, en un proyecto del cual formé parte al fungir como editor hasta que llegó la pausa gracias al famoso Covid-19.

EXPANDIENDO ALAS

Eso dicho, y con la intención latente y la buena fe de la gente de la NHL en querer expandir sus alas al mercado hispano, y el mercado totalmente abierto y disponible, no se ve motivo o razón por la cual no deberían ir tras los espacios televisivos que han dejado libres otras ligas como la NFL, la NBA, la MLS y la MLB, que es muy posible ni se llegue a jugar.

Y es que una oportunidad única para capitalizar. Una para pulir un diamante en bruto, que merece resaltar y brillar.

Especialmente cuando se toma en cuenta que, el hombre próspero es como el árbol: la gente lo rodea cuando está cubierto de frutos; pero en cuanto los frutos han caído, la gente se dispersa en busca de un árbol mejor.

Lo que quiero decir por enésima vez con esto es que poseen un diamante en bruto que deben pulir y aún desconocen tener.

Y mientras esto todo puede quedar en una ‘sugerencia a gritos’ de ‘su ex editor y fundador’ y ‘lo que pudo ser’, les recuerdo a los personeros de la NHL que, fueron ellos quienes me entregaron las llaves a un Fiat, y ante su cambio de esquemas y mi salida por la puerta de enfrente, no solo los dejé con un Ferrari, sino además, uno con un estilo digno y propio, un nuevo idioma y lenguaje —que se refleja en su glosario— y mi sello personal.

En cierre, sería lindo ver lo que un día nació como una página en blanco florecer a todo su esplendor.

Especialmente en días donde el mundo necesita de alegrías, de sonrisas y del éxtasis del gol.

Recuerde que, da el sartenazo, quien tiene el sartén por el mango.

Todo tuyo, NHL.

Los dejo. Hasta la próxima.

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